ICRA desarrolla líneas de producción que arman, programan y ensamblan switches que activan funciones como aire acondicionado o encendido de intermitentes.

Un usuario se sienta orgulloso al volante de su auto nuevo, percibe el inconfundible y universalmente conocido “olor a nuevo”. Animado por el vendedor, comienza a oprimir cuanto botón esté a su alcance para comprobar la funcionalidad de cada dispositivo nuevo que le hará la vida más fácil.

Con un par de clics podrá encender el clima, cambiar el modo, activar las intermitentes o alertar con el botón de asistencia. Todo ello podría parecer un acto cotidiano, sin embargo, encierra todo un universo en el que precisamente se encuentra la labor de ICRA; Ingeniería Control Robótica y Automatismos.

En ICRA se llevan a cabo proyectos de automatización y robótica, que conforman una parte esencial de las piezas que funcionan a la perfección en los tableros de los automóviles, en los que el usuario confía en que con un toque cualquiera de esas funciones se accionarán.

Detrás del botón de encendido

Las líneas de producción que ha diseñado, desarrollado y puesto en marcha ICRA, cumple con la función de ensamblar el switch, ésta consta de varias estaciones que a su vez realizan más de una función para optimizar tiempos y espacio.

“La primera estación es un sistema de ensamble con cortinas de seguridad, PLC’s de seguridad, sensores y servomotores, donde se adhiere un circuito que permite que las funciones se activen a un simple toque”, detalla Erick Segura, ingeniero de proyectos de ICRA.

Para garantizar que el procedimiento se haya ejecutado a la perfección, la estación cuenta con un sistema de sensores de visión, que una vez programados, garantiza que la operación se realice a prueba de errores.

Otra estación está compuesta por un quemador de chips y prensa. “Se programa la tarjeta electrónica, es decir, se agrega el software a la pieza para que ésta interprete funciones como encender el aire acondicionado”, agrega Segura.

Tras haber pasado por el proceso de programación, otra de las operaciones es una prensa que concluye el proceso de ensamblado mediante un despliegue semiautomático.

“Todos los sistemas implementados son para cumplir los requerimientos de nuestros clientes, que son: garantizar, a través de los sistemas, la seguridad de los operadores; optimizar tiempos con los dispositivos automáticos, y finalmente, tener una rastreabilidad para saber exactamente el número de lote y fecha específica de producción, en caso de presentar alguna falla”, concluye el ingeniero.